Renault invierte en la tecnología de movilidad eléctrica del futuro: el motor de flujo axial
Compartir
Los avances en los motores de flujo axial se suceden y, presumiblemente, serán la gran alternativa para los coches eléctricos. Consciente de ello, el Grupo Renault ha anunciado la compra del 21 % del paquete accionarial de Whylot, una compañía gala pionera en esta tecnología.
En la actualidad, noventa y nueve de cada cien automóviles eléctricos incluyen motores de flujo radial. Pero ninguno de ellos alcanza las prestaciones de los motores de flujo axial. ¿Por qué crees que, hasta ahora, solían incluirse solo en ese 1 % restante de modelos de alta gama?
¿Qué ventajas tienen los motores de flujo axial?
Los coches eléctricos con estos motores consiguen prestaciones mejoradas:
- Potencia superior.
- Diseño más compacto y ligero.
- Necesidad menor de imanes para conseguir un mismo par.
Sin embargo, hasta ahora, también existían algunos inconvenientes que complicaban la aplicación de esta tecnología en los motores eléctricos. En concreto:
- Elevada velocidad lineal, lo que se traducía en una elevada resistencia mecánica en los imanes.
- Tendencia del motor a calentarse. En consecuencia, precisaban un sistema de refrigeración más complicado y costoso.
- Dificultades para la fabricación en serie del estator de volumen grande.
Whylot avanza hacia la solución... y Renault se suma
La participación del Grupo Renault en esta compañía, también francesa, no es casual. De hecho, ya existía una colaboración práctica entre ambas para desarrollar e industrializar un motor de estas características. Así, se va a implementar en las cadenas cinemáticas híbridas y eléctricas de los segmentos B y C de sus turismos. El objetivo es convertirse en el primer fabricante generalista que los produce en gran volumen, con el horizonte temporal de 2025.
Las mejoras conseguidas por Whylot en sus motores de flujo axial compensan los inconvenientes mencionados y potencian las virtudes de estos sistemas. Renault no ha querido desaprovechar este filón, del que se beneficiarán a corto plazo los clientes de sus coches eléctricos.
